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Boericke: Un medicamento para la histeria y paroxismos nerviosos, ataques de desmayos y convulsiones, catalepsia, etc. El estado característico se agrava por el frío; hay gran sensibilidad al aire. Mucho temblor nervioso y desmayo frecuente. Gran flatulencia. Frialdad. Tensión en los músculos, piel y mente.

Mente (risa incontrolable), Estómago (tos nerviosa, espasmódica), Masculino (deseo violento), Respiratorio (respiración difícil; tórax oprimido; la tos se detiene, la mucosidad no se puede expectorar), Modalidades (Mejor al aire libre, frotándose. Peor por frío; el aire libre lo siente muy, muy frío), Dosis (1CH – 3CH).

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Kent: Moschus (ver foto) cura a muchas jóvenes histéricas que han llegado a la edad adulta sin conocer la obediencia. Son voluntariosas, obstinadas y egoístas. Cuando han estado acostumbradas a recurrir a artimañas para ver satisfechos todos sus caprichos desde la infancia hasta los dieciocho años, son sujetos adecuados para Moschus, Asa foetida, Ignatia y Valeriana. Por mucho que simulen ser sinceros y dignos de confianza, las sensaciones que comunican no son merecedoras de confianza. Generalmente está presente el globus hystericus, hiperestesia de la piel, temblores en los músculos, desvelo, palpitaciones, excitación, desvanecimientos, temblores. “Horribles” dolores en todo el cuerpo, oleadas de sangre a la cabeza, calambres en manos y pies, convulsiones en todo el cuerpo. Cuando se halla presente el peculiar síntoma Moschus: una mejilla colorada y fría, la otra pálida y caliente, existe sin duda alguna perversión histérica en la mente de ese paciente. Sensible al frío, se le presentan malestares por enfriarse. Teme a la muerte y habla solamente de ella cuando no tiene un malestar serio. Angustia y palpitaciones. Irritable y discutidora. Aprensión, temblores y palpitaciones. Temor de morirse si se acuesta. Vértigo al mover la cabeza o los párpados, el que mejora con el aire libre; con náuseas, vómitos y desvanecimientos. Las cefaleas mejoran con el calor y al aire fresco. Dolor de cabeza opresivo, atontador, principalmente en la frente, con náuseas y agravado con el movimiento, pero que mejora con el aire fresco. Ojos fijos; repentina ceguera o visión oscurecida, que se presentan y desaparecen. Fuertes ruidos en los oídos. Epistaxis. Una mejilla está colorada y fresca, la otra pálida y caliente; cara pálida con sudor; mueve la mandíbula inferior como si masticara. Boca y garganta secas y calientes; gusto amargo, pútrido, mucha sed, especialmente en estados histéricos. Ansía cerveza o coñac; aversión al alimento; sólo al ver la comida se siente enfermar. Vómitos. Acidez. Hipo histérico. Vómitos de sangre. Distensión timpánica del abdomen con agudos dolores. Abundante orina acuosa e incolora; la orina que se expulsa durante la noche es maloliente y abunda en mucus. En el varón, violenta excitación sexual; emisiones sin erecciones. En la mujer, violento deseo sexual; menstruos prematuros y abundantes, con dolores como tirones; hormigueo en los genitales y desvanecimientos. Constricción de la laringe. Crup espasmódico en chicos nerviosos, después de sufrir un castigo. Disnea y opresión en el pecho y el corazón. Piel fría, temblores. Desvanecimientos y palpitaciones.