Homeopatía para la Anorexia nerviosa

¿Qué es la Anorexia nerviosa?

Es un trastorno alimenticio que obliga a quienes lo padecen a restringir extremadamente su ingesta nutricional. Está clasificado como un trastorno psicológico. Las víctimas suelen tener una imagen corporal distorsionada y su objetivo es mantener su peso corporal lo más bajo posible. Buscan reducir su aporte calórico minimizando su consumo de alimentos, pueden hacer ejercicio de forma compulsiva y excesiva, o hacer ambas cosas para reducir su peso. Incluso pueden recurrir a la provocación de vómitos, y al uso de laxantes para purgar su organismo de los alimentos que ingirieron.

Quienes lo padecen temen aumentar de peso. Su peso «auto-percibido» les permite creer que tienen sobrepeso, aunque en realidad están por debajo de su peso. Este trastorno no se trata de calorías o alimentos, por lo general es una expresión de una incongruencia emocional compleja subyacente por la cual, el individuo equipara estar delgado con sentimientos de autoestima. Para algunas personas, esta forma de «auto-inanición» también puede tener el propósito de controlar un aspecto de la vida, que para quien la sufre, parece tenerla fuera de control.

Si bien el trastorno comúnmente afecta, en particular, a los niños durante la adolescencia, también puede afectar a hombres y mujeres mayores.

La anorexia no se aprecia fácilmente, ya que las personas no necesariamente están demacradas. Sin embargo, pierden mucho peso en un período de tiempo bastante corto. Por lo tanto, un individuo corpulento que pierde peso rápidamente, pero sin el punto de tener un peso corporal peligrosamente bajo en comparación con su altura, también puede sufrir de anorexia nerviosa, al igual que la persona con peso insuficiente y demacrada.

¿Cuáles son las causas de la Anorexia nerviosa?

Hay varios factores potenciales que posiblemente predisponen a un individuo a ser propenso a este trastorno alimentario. Algunas personas parecen estar genéticamente preprogramadas, otras desarrollan los rasgos de personalidad distintivos que conducen a este trastorno, pero los factores ambientales cada vez más hacen que ciertas personas se conviertan en víctimas de la anorexia nerviosa.

Actualmente, es la cultura en los medios la que propaga una imagen corporal anormalmente distorsionada. El estereotipo idealizado e idolatrado que se promueve continuamente en la industria de la moda y los medios de comunicación elogia la imagen corporal del delgado, más delgado y el más delgado como el más deseable. La creencia de «delgado es igual a sexy» somete a las personas a extremos de pérdida de peso cada vez más altos, lo que lamentablemente los expone a efectos dañinos cada vez mayores para su salud. Otra causa de la anorexia nerviosa es la exposición a casos traumáticos o de abuso, por lo que las víctimas intentan buscar el control de la vergüenza, la culpa y otros sentimientos emocionales al comprometerse con la «auto-inanición» de la anorexia nerviosa.

¿Cuáles son los signos y síntomas de la Anorexia nerviosa?

Aparte de perder peso notablemente, alguien que sufre de anorexia nerviosa cambia sus hábitos y comportamientos. Los enfermos comúnmente se enfocan extremadamente en los aspectos que rodean la comida, la alimentación, la dieta y las calorías hasta el punto de la obsesión, y desarrollan rituales en torno a su ingesta de alimentos. No solo el tamaño de las porciones se vuelve más pequeño, sino que también pueden crear excusas para no acudir a las comidas, pueden cortar la comida en trozos diminutos, pueden comer muy lentamente, pueden expresar su preferencia por comer solos o incluso pueden ocultar alimentos que se les da a modo que nadie se dé cuenta de que no lo comieron. Puede que mientan sobre haber comido, cuando no lo han hecho. Sus preferencias alimentarias pueden cambiar drástica y repentinamente, y pueden desarrollar ideas fijas, ansiedad y perfeccionismo en torno a la comida y la alimentación.

La salud de los pacientes puede, como consecuencia, deteriorarse a causa de este trastorno alimentario. Una mayor pérdida de cabello, la sensación de frío incluso en climas cálidos, la falta de energía, el cansancio constante y el insomnio son comunes. Los enfermos pueden recurrir al uso de varias capas de ropa para ocultar su pérdida de peso, y no solo por la sensación de frío. Los mareos, el desmayo y la depresión son síntomas asociados con frecuencia; en los hombres, la disminución de la libido no es un síntoma inusual de la anorexia nerviosa, mientras que en las niñas y las mujeres, la amenorrea, la ausencia de menstruación, es un signo común. Alejarse de sus círculos sociales, amigos y familiares, y retirarse a su propio entorno, aislarse cada vez más y ser reservado, son comportamientos que pueden empezar a manifestarse.

El cuerpo, maltratado por la «auto-inanición» de quien lo sufre, puede mostrar signos de graves trastornos de salud que requieran tratamiento médico. A medida que se le niegan al cuerpo los nutrientes que son esenciales para que funcione correctamente, se pueden desarrollar problemas de salud más graves. El individuo puede dañar los sistemas principales del cuerpo. El equilibrio hormonal puede desequilibrarse, el sistema nervioso puede desordenarse, el sistema gastrointestinal puede dejar de funcionar correctamente e incluso el sistema cardiovascular puede dejar de funcionar normalmente. Si la anorexia es de larga duración, los daños físicos pueden ser muy graves y posiblemente no sean reversibles.

¿Homeopatía para la Anorexia nerviosa?

La Materia Médica homeopática tiene numerosos remedios, a disposición del homeópata experimentado, para ofrecer ayuda al enfermo de este trastorno alimentario. Sin embargo, el objetivo principal es eliminar los problemas subyacentes, ya sean emocionales, ambientales u otros.

Algunos remedios homeopáticos que coinciden con los síntomas de la anorexia nerviosa son:

Alfalfa: El apetito disminuye, pero también aumenta al máximo en la bulimia. Come a menudo, no puede esperar sus horarios de comida; sólo mordisquea la comida, deseos de dulces.

Antimonium crudum: Disgusto por la comida (pensar en ella o incluso olerla). Come vorazmente, demasiado. Se siente lleno, con náuseas que le provocan ganas de vomitar, pero las náuseas no se alivian con los vómitos. Individuo gruñón.

Arsenicum album: Náuseas por ver u oler alimentos. Ardor en el estómago incluso con poca comida. Vómitos violentos que no alivian las náuseas. Gran sed a pequeños sorbos. Individuos ansiosos e inquietos.

Bryonia: Hambre voraz con pérdida del gusto. Vómitos de líquidos y bilis inmediatamente después de comer. Las bebidas calientes provocan el vómito. Hay desmayos y náuseas al levantarse.

Ignatia: Gran aversión a una dieta normal, pero ansia de cosas indigestas o ácidas. Náuseas y vómitos de líquidos. Hay una sensación de vacío en el estómago. Personas deprimidas, a causa del dolor o la preocupación. Hay muchos suspiros y bostezos.

Ipecacuanha: Náuseas violentas que no se alivian con el vómito. Agotamiento, con sensación de debilidad. Capa gruesa en la lengua. Palidez. Irritabilidad. Individuos gruñones e insatisfechos.

Lycopodium: Hay hambre excesiva con debilidad en la digestión, y bulimia con hinchazón. Comiendo poco se siente lleno. Sensación de vacío en el estómago. Delgadez, particularmente de la parte superior del cuerpo. Irritabilidad, no soporta la contradicción.

Pulsatilla: Hay náuseas e intolerancia a las comidas grasosas. La digestión es lenta. El estado de ánimo de las personas se caracteriza por la resignación, pero también por el mal humor, la tristeza y la taciturnidad.

Sepia: Náuseas al ver y oler la comida. Hay una disposición a vomitar después de comer, y una sensación de ardor en la boca del estómago. Asco de la grasa. Flaqueza con debilidad. Tristeza emparejada con indiferencia hacia todo. Desánimo e irritabilidad. Busca la soledad.

Fuente: por Authors of Clever, 31 de Julio 2019